Prepara a tus hijos galletas de quinoa y aceite de coco esta Navidad
La Navidad está cada vez más cerca, y con la llegada del frío y estas fechas tan entrañables a todos nos suele apetecer preparar dulces y galletas para niños caseras. Te proponemos una deliciosa receta de galletas veganas de quinoa y aceite de coco para que tus peques se chupen los dedos.
Estas sencillas y exquisitas galletas son ideales para tomar en el desayuno, en cualquier merienda, o como picoteo entre horas. También puedes prepararlas para una comida familiar o entre amigos, y tus hijos las disfrutarán solas, junto a una taza de leche o con chocolate caliente.
Los ingredientes principales de estas galletas veganas son la quinoa y el aceite de coco, dos alimentos muy nutritivos y cargados de excelentes propiedades para la salud. Además, no contienen ningún ingrediente de origen animal, por lo que son el dulce perfecto para los que siguen una dieta vegana o vegetariana.
Actualmente, el aceite de coco virgen forma parte del grupo de los llamados 'superalimentos', porque son muchas las funciones y propiedades que este tipo de aceite aporta al organismo. Una de sus características más destacadas es su alto contenido en ácidos grasos esenciales, lo que lo convierten en un alimento perfecto para cuidar la salud de grandes y pequeños a través de la alimentación.
Por su parte, la quinoa es un cereal con un alto valor proteico, por lo que resulta ideal en dietas infantiles, pues contiene alrededor de 16 gramos de proteínas por cada 100 gramos. Otros beneficios de la quinoa son también su alto contenido en fibra soluble, en aminoácidos y en omega 6.
¿Cómo preparar galletas veganas de quinoa y aceite de coco?
Si quieres preparar estas deliciosas galletas veganas para la merienda de tus hijos, esta receta sólo te llevará 40 minutos y quedarás sorprendida con los resultados.
Para preparar una docena de galletas veganas de quinoa y aceite de coco, necesitarás los siguientes ingredientes: ¾ de taza harina de almendras, ½ taza de harina de quinoa, ½ cucharadita de levadura, una pizca de sal, 1 cucharada de aceite de coco, ¼ de taza de sirope de agave.
El modo de preparación es muy sencillo, tan sólo tendrás que seguir un total de cinco pasos:
- El primer paso es mezclar las dos harinas (la de almendras y la de quinoa), junto con la cucharadita de levadura y la sal. Esta mezcla la puedes hacer de forma manual o utilizando un robot de cocina si quieres prepararla en menos tiempo.
- A esta mezcla deberás añadir después el aceite de coco y el sirope de agave. Te recomendamos que tanto el sirope como el aceite de coco los añadas poco a poco, porque al tratarse de dos sustancias muy viscosas, pueden modificar sustancialmente la textura de la masa.
- Una vez que hayas mezclado todos los ingredientes y los hayas batido bien, obtendrás una bola de masa grande que deberás meter en el frigorífico, previamente envuelta en un trapo de tela o en papel film transparente, durante aproximadamente unos 15 minutos.
- El siguiente paso consiste en retirar la masa del frigorífico, y hacer dos bolas con el conjunto de la masa. Después, deberás colocar cada una de estas bolas sobre un trozo de papel vegetal para horno.
- Una vez que cada bola esté sobre su correspondiente trozo de papel vegetal, deberás estirar cada una de las bolas utilizando un rodillo, hasta que logres un grosor aproximado de medio centímetro.
- Tras obtener estas láminas de masa, podrás empezar a cortar las galletas con la forma que más te guste, bien con un molde de galletas o con un cuchillo. Una vez cortadas las galletas, colócalas en la bandeja del horno previamente engrasada con un chorro de aceite de oliva, y hornéalas durante 15 minutos, hasta que compruebes que están bien doradas.
El siguiente paso será… ¡que tus hijos se las zampen encantados!