Internet, como todos sabemos, tiene dos caras. Una de ellas es luminosa, ya que la red está llena de información que podemos utilizar para aprender y desarrollar las actividades que nos gustan. Del mismo modo, ofrece diferentes formas de comunicación y expresión con nuestros seres queridos o con personas con las que compartimos intereses y sensibilidades.
¿Cuáles son las ventajas de Internet?
Por tanto, Internet es una manera muy cómoda de entretenernos disfrutando de vídeos de cocina, buscando nuevas recetas, escuchando pódcast o planificando viajes o recorridos a través de Internet.
El mundo online ofrece muchas vías para planificar nuestras comidas o para acercarnos a una mayor conciliación de la vida personal y laboral. Y es que, en la actualidad, el teletrabajo y otras modalidades de trabajo garantizan una gran cantidad de beneficios.
¿Y sus peligros?
Sin embargo, una red tan global y tan abierta también plantea una serie de desafíos y amenazas, tanto para nosotros como para nuestros hijos. Todos somos vulnerables a ser víctimas de las amenazas que se esconden en la red, como muestra este estudio de ExpressVPN.
Pero, en el caso de los niños y adolescentes, pueden sufrir sus inconvenientes de manera más peligrosa. La razón detrás de esto está, en primer lugar, en la creciente exposición de los jóvenes a las pantallas y al entorno digital. Los más pequeños hacen uso de Internet tanto para hacer sus tareas escolares y universitarias, así como para utilizar las plataformas de redes sociales o jugar a videojuegos.
La otra razón principal está en la falta de información en relación a los peligros de Internet y de la hiperconectividad, y de las maneras de atajar todos estos problemas.
Internet y los peligros para los niños
Internet puede ser una fuente de inspiración, pero también un entorno que entraña una serie de peligros y dificultades. Hoy en día, cada vez son más los niños que están expuestos a las pantallas a edades muy tempranas. En muchos casos, son una vía de distracción para mantenerles entretenidos.
Sin embargo, en la mayoría de ocasiones, se pasan por alto las consecuencias que puede generar esa sobreexposición en la infancia. Entre sus principales consecuencias, pueden afectar sus capacidades cognitivas, empático-afectivas e, incluso, motrices. Las comentamos a continuación:
Dependencia o adicción a Internet
Esa exposición continuada puede acabar generando patrones de dependencia o adicción a Internet. Es de sobra conocido como muchas plataformas de redes sociales y otros sitios web utilizan estrategias de manipulación psicológica para mantener enganchados a los usuarios.
Los niños y adolescentes son especialmente vulnerables a esto, ya que, por los patrones sociales de su generación, la imagen digital y la reputación en línea tiene un peso muy importante en sus relaciones y en su manera de interactuar con el mundo.
Distorsión de la realidad
La distorsión de la realidad que genera pasar mucho tiempo en la red es otro de los retos a los que se enfrentan los jóvenes. Además, se pueden encontrar con contenido ofensivo, inadecuado o violento que circula por la red y que acaba formando parte del consciente e inconsciente de quien lo visualiza. Hablamos, por ejemplo, de violencia, pornografía, noticias falsas, etc.
La manera de atajar esta situación pasa, en primer término, por la educación en el uso responsable de la red. Porque solo a través de unos sólidos cimientos, podremos edificar prácticas digitales constructivas y adecuadas.