A pesar que en términos normales la palabra derretir se refiera a un concepto que alude al roce que desgasta algo, en verdad su significado va más allá en el lenguaje gastronómico. La definición más acertada en este caso, sería la disolución de cualquier elemento sólido que a través de la aplicación de calor, se convierte en líquido.

El acto de derretir en cocina, es sinónimo de fundir y se refiere a la técnica de fundir o derretir alimentos, puesto que la materia de la que está compuesto cambia de estado y pasa de sólido a líquido, gracias al efecto del calor. A continuación, te mostramos como funciona esta técnica.

¿Cómo derretir alimentos en la cocina?

Cuando se indica en una receta que debemos derretir algún alimento, lo que quiere decir es que vamos a cambiar su estado de sólido a líquido. Esto se consigue a raíz de la aplicación de calor en el producto alimenticio, modificando su consistencia para darle un toque más líquido, a la vez que suave y uniforme.

Sin embargo, no todos los alimentos se pueden derretir. Un ejemplo es el pescado, la carne o las verduras, pues sería imposible derretir estos alimentos. Sólo se pueden derretir alimentos tales como el chocolate, la mantequilla, el queso, etcétera. Es decir, los alimentos que son aptos para derretir son los que poseen una consistencia más suave y cremosa. Es fácil identificar los alimentos más propensos a ser derretidos, muchos de ellos son ingredientes muy comunes y muy utilizados dentro de la repostería, pastelería o incluso en salsas para platos elaborados.

Existen varios métodos para derretir un alimento y que éste se convierta en una masa líquida y suave, a la vez que uniforme. Las maneras más populares de derretir son en el baño maría, en el horno y en el microondas.