Los bizcochos saben mejor si los rellenamos. Sí, el relleno de una buena tarta es esencial para que el pastel sea un éxito. Opciones tenemos muchísimas; y es que, en el mundo de la repostería, los rellenos de tartas abundan. Hoy te mostramos cuáles son los mejores rellenos de tartas para que puedas prepararlos en casa.
1. Crema Chantilly
Es una crema muy sencilla de hacer que queda genial en todo tipo de tartas y postres fríos. Se trata de una nata batida y ligeramente azucarada y perfumada con vainilla. Aunque es sencilla en su elaboración, hay que tener en cuenta que se conserva mejor en la nevera, pues es uno de los rellenos que se derriten más rápidamente.
2. Merengue suizo
Otro de los rellenos para tartas más comunes y populares es el merengue suizo. Es realmente fácil de hacer en casa. Se obtiene una crema blanca y brillante que sirve tanto para rellenar como para utilizarla a modo de decoración. Además, el merengue se puede hornear o flambear.
3. La Buttercream
Es uno de los rellenos estrella, pero también uno de los más complicados en su elaboración. Aún así, si se siguen los pasos correctamente, lo tendrás listo en pocos minutos.
Este relleno está hecho con claras de huevo que se cuecen medianamente. Es, como en el caso anterior, un relleno que se puede colocar entre las capas de bizcocho o bien para decorar la tarta, pues su efecto satinado es ideal para estos detalles.
4. Crema de queso
Esta crema es deliciosa y tiene cierto toque ácido, algo que rebaja el sabor dulce del azúcar. Es perfecta para las tartas más especiadas, como la de zanahoria, la de calabaza o el pastel colibrí. Debemos tener cuidado, pues su consistencia no es muy fuerte y no aguanta demasiado fuera de la nevera.
Trucos y errores que debemos evitar al hacer rellenos de tarta
Aunque cada relleno es un mundo, siempre hay trucos que podemos extender a todo tipo de cremas:
- Por ejemplo, la crema siempre debe manejarse a temperatura ambiente. No te engañes, si has hecho una crema demasiado blanda, no ganará consistencia si la metes en la nevera. Una vez la vuelvas a manejar, perderá el frío y volverá a ser blanda.
- Uno de los secretos más importantes es no pasarnos con el tema de los batidos. Opta siempre por batir a una velocidad media. Si nos excedemos, estaremos excediéndonos con el aire que se introduce en el relleno y podría cortarse.
- Intenta, en la medida de lo posible, preparar la crema justo antes de rellenar la tarta. Así conseguirás colocarla perfecta, sin que pierda consistencia.
- Hay muchos tipos de cremas, y muchas de ellas necesitan queso, nata o leche. En estos casos, estas cremas piden frío. Es por seguridad, puesto que, si no tienen frío, podrían llegar a cortarse. En el caso de que se trate de una tarta que no puedas refrigerar, simplemente escoge otro relleno sin estos tres ingredientes.
- Está claro que no todos contamos con los mismos recursos, pero en cuestión de repostería, los utensilios de cocina son casi esenciales. Es imprescindible tener una batidora eléctrica de doble varilla. Si contamos con una batidora de mesa, mejor que mejor. Si no hacemos las cremas con el aparato correcto, podríamos estar padeciendo hasta el final del proceso.
- Usa siempre los ingredientes de la mejor calidad. Usa mantequilla de calidad, azúcar, chocolate, vainilla en pasta o extracto puro de vainilla. Usar ingredientes de poca calidad en una crema o relleno, podrían dar como resultado texturas poco consistentes o sabores extraños. No es tan caro apostar por ingredientes de una calidad extra, quizá podamos ahorrar en otra cosa, pero en este punto mejor no.