Aprende a cocinar deliciosas verduras rellenas
Ya sabemos todos que las verduras son sanas. No obstante, muchas veces se nos resisten. Quizá el problema esté en no prepararlas de una forma divertida, con todo su sabor y sus propiedades. Por ejemplo, las verduras rellenas siguen siendo una fuente de nutrientes y vitaminas importantes, pero es evidente que de esta forma logramos que nos entren mejor por los ojos y que si en casa alguien, como los niños, no es muy partidario de ellas, termine por convencerse. Aprende a cocinar estas deliciosas verduras rellenas y aporta recetas sanas a tu día a día.
Pimientos rellenos
Normalmente solemos ver recetas de los pimientos rojos. Los grandes. Estos pimientos se rellenan de carne o de arroz y están realmente deliciosos. No obstante, los pimientos italianos, los verdes largos, también pueden hacerse rellenos. Sí, son pimientos que suelen comerse fritos, pero no hay problema en vaciarlos y rellenarlos de deliciosos ingredientes extra.
Tan sólo tienes que partir los pimientos verdes por la mitad y elegir el relleno. En este punto son muchas las opciones, aunque la mezcla de quesos frescos o quesos en crema quedan bastante bien. También puedes rellenarlo con queso y bacon.
Una vez elijas el relleno, mételos en el horno y cúbrelos con papel de aluminio. Déjalos hasta que la carne del pimiento esté blanda, aproximadamente unos 40 minutos.
Tomates rellenos
Botánicamente hablando, los tomates son una fruta. No obstante, se pueden cocinar como cualquier otra verdura rellena, siendo un ingrediente top dentro de las ensaladas. Es un alimento muy nutritivo, con grandes cantidades de vitamina C y de folato. Además, es la fuente más potente del llamado licopeno, con propiedades antioxidantes y anticancerígeno.
Puedes rellenarlo de un montón de cosas. Los tomates rellenos de atún y gratinados con queso, son un plato que gusta a casi todo el mundo. No obstante, también hay otras formas interesantes y diferentes de rellenarlos. Eso sí, si quieres hacerlo rápido, hazte con un vaciador de tomates. Son unos utensilios muy útiles que te permitirán aprovechar toda su carne y hacer más hueco para el relleno.
Puedes rellenarlo de queso en crema o incluso de cuscús. Si además te apetece darle un toque diferente, experimentando con los sabores, rellénalo con un cuscús dulce, a base de fresas o mango.
Berenjenas rellenas
La berenjena rellena es un plato de lo más típico. Es un ingrediente considerado imprescindible en la cocina mediterránea. Lo cierto es que sus propiedades son bastante interesantes, pues nos ayuda a mantener a raya el colesterol y la oxidación celular. Además, la berenjena es bastante ligera, algo que para los meses veraniegos viene muy bien.
Siendo sinceros hay un montón de recetas de berenjenas rellenas. Lo importante es, ante todo, saber vaciarlas bien. Ten en cuenta que su carne es bastante dura y su piel muy fina. Si no las cocinas previamente no podrás vaciarlas. Normalmente se suelen hornear durante unos 20 minutos a unos 200ºC para que la carne se suelte y poder así vaciarla mejor. Hay otras formas, como por ejemplo partir por la mitad las berenjenas y ponerlas a cocer.
Una vez estén hechas, sólo tendrás que dejar que se enfríen y vaciarlas con una cuchara. Reserva el interior para mezclarlo con los ingredientes que quieras añadir. Opta por las clásicas berenjenas rellenas de carne. Un sofrito de cebolla y tomate al que se le añade la carne picada y la carne de la berenjena. No obstante, hay más opciones, desde las berenjenas rellenas de atún, las que usan sólo verduras en el sofrito o las que son rellenas con pescado.
Calabacines rellenos
Para terminar, hablemos de los calabacines. Ingredientes compuestos por un 95% de agua. No tiene ningún contenido calórico, por lo que puede ser muy bueno para nuestro organismo, además de poder mezclarlo con otros ingredientes más calóricos para compensar.
En este caso, no hace falta que cocines el calabacín para extraer su carne. Puedes vaciarlo con la ayuda de un cuchillo cortándolo por la mitad y dejando un borde para que no pierdan su forma. Con una cuchara podrás ir sacando la carne y reservarla para el relleno.
Cocina esta carne con otros ingredientes como tomate, carne, atún o queso y rellénalos. Luego no te olvides de meterlos al horno para gratinarlos.