Cómo cocinar Kale

El poco conocimiento que tenemos ante un alimento novedoso como el kale nos puede hacer pensar que como es un vegetal sólo podemos comerlo en ensalada y las opciones para cocinarlo son limitadas. Sin embargo, nada más lejos de la realidad, ya que disponemos de varios métodos de cocción compatibles con la col kale.

Kale al horno

Si cocinamos al horno el kale, conseguiremos darle una textura diferente a esta verdura, ya que con el calor del horno el kale se seca un poco y queda crujiente y delicioso. Para hacer el kale en el horno tenemos que:

• Precalentar el horno a 180º
• Forrar una bandeja de horno con papel vegetal
• Lavar y escurrir el kale bien con papel absorbente para que quede bien seco
• Preparar un aliño con aceite de oliva, hierbas provenzales, pimienta y sal gorda
• Colocar las hojas de kale en la bandeja del horno y regarlas con el aliño preparado
• Meter en el horno durante 12 o 15 minutos hasta que los bordes estén dorados
• Sacar del horno y servir

Cómo hacer el kale al microondas

¿Que no tienes horno? No pasa nada, el microondas también nos puede servir para cocinar el kale ¡y sin perder ese punto crujiente! Para preparar el kale en el microondas necesitaremos:

• Separar sólo las hojas del kale, cortarlas en trozos medianos (de un sólo bocado) y lavarlos bien
• Condimentar las hojas con sal, pimienta, especias, aceite…
• Colocar las hojas en un recipiente apto para microondas lo más extendidas posible
• Meter el recipiente en el microondas a máxima potencia durante 2 minutos
• Abrir y comprobar el estado de jugosidad. Añadir otros 2 minutos si aún están demasiado jugosas.
• Volver a comprobar y si siguen jugosas en exceso ir probando con periodos de 1 minuto o 30 segundos
• Sacar y reservar para que adquieran el toque crujiente

Cocinar el kale al vapor es así de fácil

Si preferimos mantener todas las propiedades del kale intactas, la cocción al vapor es la mejor opción, ya que conseguimos cocinar el kale sin que pierda ningún jugo. En este caso es necesario:

• Lavar y cortar las hojas de kale
• Colocar los trozos de kale en un colador o recipiente apto para cocinar al vapor
• Poner agua a hervir en un olla y cuando alcance el punto de ebullición, colocar el colador o el recipiente para vapor con el kale encima, con cuidado de que el agua no toque el alimento.
• Tapar y dejar cociendo al vapor durante 30 o 40 minutos

Cocinar el kale a la sartén o salteado también es posible

Bien podemos aprovechar las hojas de kale cocidas al vapor para luego saltearlas en la sartén, o bien podemos saltear el kale directamente en la sartén siguiendo estos pasos:

• Lavar las hojas de kale y partirlas en trozos de 2 o 3 centímetros y picar unos ajos
• Poner una sartén con aceite a fuego medio y rehogar los ajos picados durante 1 minuto
• Agregar los trozos de kale, tapar e ir removiendo para que no se queme durante 5 o 7 minutos

Existen 3 clases distintas de col rizada o kale, de las cuales ninguna es la berza. Suele haber bastante confusión entre el kale y la berza, llegando a pensar que son lo mismo, pero nada más lejos de la realidad. Los diferentes tipos de kale con los que podemos cocinar son:

• El kale verde o col verde rizada: las hojas más tiernas tienen un sabor más suave, pero esta clase de col se puede usar para todo tipo de recetas.
• El kale morado: este tipo de col se caracteriza por los tonos morados de sus hojas y su suave textura la convierten en ingrediente ideal para platos crudos o poco cocinados.
• El kale lacitano o col Dinosaurio: el sabor es como la del kale verde, pero su textura es mucho más rugosa, como la piel de los dinosaurios (de ahí su nombre). Enste tipo también puede ser utilizado en todas las recetas.

La versatilidad del kale permite preparar multitud de recetas con esta verdura. Desde usarla como guarnición de platos de carne o pescado, como recetas a base de otras verdura, pastas o cereales. También podemos usar el kale para hacer patés para untar o incluso platos internacionales como el chucrut. También es compatible con ensaladas y cremas por supuesto. De hecho, podemos usar el kale incluso en pizzas. Lo importante es tener en cuenta el punto amargo que caracteriza a esta verdura y saber contrarrestarlo con los ingredientes adecuados, ya sean otros alimentos o especias y condimentos.

Seguro que se nos ocurren múltiples maneras de cocinar el kale e incluir esta col en nuestras recetas, pero ¿se te había ocurrido convertir las hojas de kale en un snack sabroso y saludable? Si estás buscando una alternativa a las patatas fritas de bolsa, ¿por qué no pruebas a hacer unos chips con el kale?

Cómo hacer chips de kale

Este snack sano y crujiente nos permitirá picar algo entre horas o como aperitivo de forma saludable. Además, esta receta es compatible con varios métodos de cocina como el horno o el microondas, así que basta con tener una de las 2 opciones para poder preparar unas deliciosas chips de kale:

• Lavar y cortar las hojas de Kale (guardar los tallos para otras recetas como las cremas)
• Secar bien con papel absorbente y colocar en una bandeja de horno forrada con papel vegetal o en un recipiente apto para microondas (según nuestra opción de cocinado)
• Verter un poco de aceite por encima de los trozos de kale
• Meter la bandeja en el horno o el recipiente en el microondas
• Hornear durante 15 minutos a 180º aproximadamente o dejar en el microondas durante 2 o 3 minutos a máxima potencia
• Sacar y reservar