La fondue de queso es uno de los platos más internacionales de la gastronomía suiza. La fondue nace de una vieja costumbre entre pastores. Al parecer, en las zonas más montañosas de Suiza, estos pastores calentaban trozos de queso viejo con la intención de atemperar sus fríos cuerpos ante las inclemencias del tiempo. Hoy es un plato de éxito que puede hacerse en cualquier casa. Ahora bien, si quieres hacer una buena fondue, quizá te vengan bien una serie de truquitos.
5 trucos para hacer una fondue con queso de éxito
No es que sea complicado, aunque no se trata únicamente de calentar queso y ya está. La fondue tiene su receta, y como tal, hay que seguirla. Ahora bien, te vamos a aportar una serie de trucos que pueden venirte muy bien para quedar estupendamente frente a tus invitados.
La elección del queso para una fondue
Es, sin duda, lo más importante. Prácticamente todos los quesos pueden fundirse. No obstante, no todos sirven para una fondue. Los más empleados son quesos como Le Gruyère y Vacherin Fribourgeois. No obstante, no son los únicos. También es frecuente ver fondues hechas con Emmental, Raclette, Apenzeller, Tilister o Sbrinz.
¿Significa esto que los quesos españoles no valen para una fondue? Bueno, en la receta original, como es de esperar, no aparecen. Pero los quesos españoles son de gran calidad, y hay muchas variedades. No importa si es de vaca, de oveja o de cabra. Aquí lo importante es que el queso tenga humedad. Si usas un queso muy curado y seco, se te quedará una masa que poco parecerá una fondue.
El vino, zumo y sidra
Aunque no lo creas, la fondue suiza lleva, además del queso, bastantes más ingredientes. Para empezar, lleva vino blanco. No dudes en verter un chorro de vino blanco junto con un poco de zumo de limón. Esto le dará un sabor increíble al plato. En algunas regiones, el vino es sustituido por sidra con cierto toque afrutado. Además, también se le puede añadir zumo de manzana o un espumoso.
Otros ingredientes
No creamos que con el queso el vino o el zumo tenemos bastante. Lo cierto es que una receta de fondue de éxito, debería incorporar otros ingredientes. En la original, se añaden toques de ajo, pimienta y nuez moscada.
Hay combinaciones más modernas que incluyen ingredientes como cebollas, chalotes, comino, pimiento rojo o incluso curry. Todo es bienvenido para darle un toque exótico y diferente. Recuerda que hay pocos ingredientes que no queden bien con un buen queso.
Cuando la fondue se corta
No siempre pasa, pero quizá si es la primera vez que haces una fondue puedes encontrarte con este problema, una fondue cortada. Simplemente debes colocar la olla de fondue en el fuego y añadir una cucharada de vino blanco con un poco de fécula de maíz disuelta en zumo de limón. El zumo de limón intenta que sea recién exprimido. Si se ha quedado muy líquida, puedes añadir más queso o maicena disuelta en vino. Si queda demasiado espesa, por el contrario, deberás añadir un poco más de vino.
¿Qué se moja en una fondue?
Los pastores la tomaban con pan. Se recomienda el pan blanco, el payés, la baguette, el pan de cereales o el pan sin gluten. No obstante, no es lo único con lo que puedes comer una deliciosa fondue. Por ejemplo, las patatas son un excelente aliado para este plato.
Hay gente que prefiere tomarla con verduras troceadas, ligeramente cocidas al vapor. Sin duda es una opción que contrarresta la pesadez del pan o la patata. Además, también se puede añadir trozos de salchicha ahumada, tomate cherry o champiñones. El límite lo pones tú.