La desecación es una técnica culinaria que está especialmente pensada para poder conservar mejor los alimentos que tenemos en la nevera. Y es que ¿cuántas veces has terminado tirando a la basura ingredientes porque se han estropeado? Si te decantas por desecar alimentos conseguirás alargar al máximo su vida útil y evitarás desechar comida.
En Mami Recetas vamos a descubrirte en qué consiste el método de la desecación de alimentos. Además, también te indicaremos los métodos más efectivos a la hora de desecar los ingredientes y conseguir que duren por más tiempo.
¿En qué consiste la desecación de alimentos?
Si quieres que tus alimentos frescos duren más tiempo, no hay alternativa mejor que optar por la desecación de productos. Para ello debes saber que no existe ninguna técnica secreta sino que, simplemente, deberás seguir unas pautas que te ayudarán a reducir el agua y, por tanto, a conseguir que el ingrediente aguante mejor.
Se pueden desecar una gran cantidad de productos como, por ejemplo, carnes, pescados, verduras, setas, frutas, etcétera. Y en modo alguno esta técnica estropeará el producto, simplemente, lo secará para que se pueda conservar por más tiempo.
Eso sí: tienes que tener claro que, si te decantas por la desecación de alimentos, estos experimentarán una serie de cambios tanto en la apariencia como en el sabor y la textura. Y es que no es lo mismo comer un pescado fresco que uno salado, ¿verdad? Pues cuando está salado es porque lo hemos desecado.
Cómo desecar alimentos: las 3 técnicas más comunes
Si quieres desecar alimentos en casa tienes que sabe que existen tres métodos que son los más comunes en los hogares. Aquí te dejamos un listado con los más destacados:
- Desecar al aire libre: sobre todo esto se hace con las setas. El ambiente seco puede extraer el exceso de humedad de los alimentos y hacer que aguante por más tiempo. Los pescados también pueden tratarse con este método.
- Mediante el calor del sol: el sol también puede ayudarnos a desecar alimentos. Sobre todo las hortalizas o las frutas suelen funcionar perfectamente con este método
- Al horno: y, por último, el horno también resulta idóneo para extraer la humedad de los alimentos pero, para ello, deberemos encenderlo a una temperatura baja de unos 50ºC.
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